Es frecuente que escuchemos de términos como intrusión y uso indebido de las instalaciones, y aunque a veces puede haber confusiones para diferenciarlos, existen características propias muy fáciles de identificar cuando se conocen ambos conceptos.
Conocer su significado es importante para conocer el protocolo en el que el personal de seguridad privada procederá y posteriormente realizar el informe con los conceptos adecuados si es requerido.
Concepto y características de una intrusión dentro de instalaciones
Por definición, la intrusión es la acción de introducir a alguien, algo o así mismo de forma ilegal o indebida.
Cabe mencionar que las autoridades de cada edificación estipularán y determinará dichas maneras indebidas, en pocas palabras, dará a conocer lo que está permitido o no introducir dentro del lugar ya sea en cuestiones de objetos o sujetos respectivamente dentro de todas sus áreas.
Es importante tener bien determinado las reglas de seguridad no solo dentro de una edificación, sino también lo que ocurre en todos sus accesos, estacionamientos, almacenes, patios y otros espacios, de acuerdo a sus características.
En términos reales, el personal de seguridad privada deberá de tener en cuenta todo lo estipulado por las autoridades de la edificación y vigilar que personas no sobrepasen el área de Control de Accesos sin permiso o consentimiento del guardia en donde en muchos casos requerirá de identificación o permisos de las autoridades mediante una comunicación clara y rápida.
Uso indebido: sus conceptos y características
El uso indebido es el acto de introducirse así mismo o un objeto autorizado de forma indebida de acuerdo a los estatutos de seguridad del lugar.
Aunque las personas u objetos que se están introduciendo dentro del perímetro son autorizadas, es decir, pertenecen a los trabajadores o materiales de uso común en el lugar, es vital que se cuente con el consentimiento del propietario y de personal de seguridad del lugar en caso de haber.
Uno de los principales errores de muchas empresas, oficinas y otros sitios, es tener una confianza ciega de sus trabajadores dándoles acceso libre y sin ninguna supervisión, causando el efecto “caballo de Troya” en donde existen un gran riesgo en donde los empleados puedan cometer intrusión de otras personas u objetos que comprometan a las instalaciones y lo que guarda.
Cuando se trata de una edificación que alberga información u objetos valiosos, es de vital importancia limitar la libertad de desplazamiento de sus trabajadores quienes poseen conocimientos de la distribución de las instalaciones, horarios, costumbres, puntos ciegos, etc. Pudiendo realizar un atentado contra el edificio dando información para robar o realizar otros actos ilícitos, que desafortunadamente, son más comunes de lo que se piensa.
Para poder fortalecer la seguridad de una edificación, es necesario contar con personal como guardias de seguridad, puertas de seguridad e identificación ya sea manual o automatizado, casetas de vigilancia en los estacionamientos, cámaras de circuito cerrado, entre otros métodos los cuales deben estar perfectamente planeados, gestionados y coordinados para que ningún acto de intrusión o uso indebido pasen desapercibido.